Santiago, Chile, 13 de Diciembre.
Departamento Científico, Hydraluvx
La llegada del Covid-19 ha causado un cambio radical en nuestra vida. El hecho de salir siempre con la mascarilla, lavarse las manos continuamente y mantener una separación de 1 a 2 metros con el resto, son hábitos ya inculcados en este momento de la pandemia. Estos cambios en la vida cotidiana son nuestra primera línea de defensa contra el contagio del virus, pero esto es suponiendo que el contagio se produce solo por fuentes cercanas a personas contagiadas.
Si alguien contagiado tose, estornuda o habla cerca nuestro, este expulsará microgotas que contienen centenares de virus, pero estos sedimentarán en poco tiempo debido a su tamaño. Si esto fuera totalmente cierto, entonces las medidas preventivas señaladas al comienzo serían suficientes para no contagiarse. Lo realmente complicado es que esta es solo una forma de contagio. El doctor David Fisman, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Toronto, Canadá, indicó en una entrevista lo siguiente: “estudié los primeros contagios masivos del virus en buques transatlánticos, en donde los pasajeros eran puestos rápidamente en cuarentena en sus habitaciones, sin contacto directo el uno con el otro. Aun así, tuvieron grandes índices de contagio. Esto fue debido a que las habitaciones compartían la ventilación, y por lo tanto, se podría concluir de que el virus era aerotransportado”. (Reportaje completo: https://www.youtube.com/watch?v=8ubdB5n5k4w).
Hay que considerar que el Covid-19 es de tamaño nanométrico, con un diámetro de alrededor de 50 a 140 nanómetros, o sea de 50 a 140 mil millonésimas de metro. Esto le permite adherirse o estar contenido no solo en gotas, sino también en aerosoles partículas, que por su pequeño tamaño pueden quedar suspendidas un largo tiempo antes de sedimentarse. (Ver fuente: https://ucsdnews.ucsd.edu/pressrelease/covid-gets-airborne).
La controversia sobre si el virus del Covid-19 se puede transmitir por el aire no fue aclarada al comienzo de la pandemia. Después de un año y medio desde la aparición de los primeros casos, en mayo de 2021, los centros de control de enfermedades estadounidenses reconocieron el SARS-COV-2, que es el virus causante del Covid-19 y que puede ser aerotransportado y es altamente transmisible por el aire. (Ver fuente: https://www.bmj.com/content/373/bmj.n913).
No solo el uso de equipo de protección personal (PPE) es suficiente para prevenir el contagio. El poder ventilar los espacios puertas adentro, o contar con sistemas de purificación de aire se hacen indispensables para poder eliminar el virus del Covid 19, ya que este virus puede permanecer por un tiempo indeterminado suspendido en el aire en espacios cerrados, tales como hospitales, hostales y talleres, para luego sedimentar en algún otro momento.
El poder higienizar el aire en espacios cerrados puede hacer la diferencia para evitar el contagio. Mediante dispositivos ultravioleta especialmente diseñados, el aire de un ambiente puede recircular y pasar por cabinas en donde la irradiancia UV aplica una dosis germicida letal contra toda amenaza posible que pueda haber en el aire.
Fuente imagen: https://ec.europa.eu/jrc/en/news/covid-19-how-better-understanding-airborne-transmission-key-break-chain-infection
